
Las Redes de Área Extensa (WAN, por sus siglas en inglés) son sistemas de comunicación que abarcan grandes distancias geográficas, como ciudades, países o incluso continentes. Estas redes permiten la interconexión de múltiples redes locales (LAN) y proporcionan una infraestructura esencial para la transferencia de datos y la comunicación a larga distancia.
Las WAN son fundamentales en el mundo moderno, ya que soportan la transmisión de información entre diferentes ubicaciones, facilitando el intercambio de datos, la colaboración entre empresas y la comunicación global. Tecnologías como las líneas alquiladas, la conmutación de paquetes y el uso de satélites son comunes en la implementación de WANs, cada una con sus propias ventajas y desafíos.
En resumen, las Redes de Área Extensa son la columna vertebral de la conectividad global, permitiendo que organizaciones y personas se comuniquen y compartan información de manera eficiente y segura a través de largas distancias.